SUPERESTRUCTURA TRUJILLISTA 62 AÑOS DE SOBREVIVENCIA.
Por: Ángel María De León.
El autor es Abogado y Doctor en Ciencias Políticas.
CON MOTIVO DE CUMPLIRSE UN NUEVO ANIVERSARIO DEL AJUSTICIAMIENTO DEL TIRANO CRUEL Y SANGUINARIO DE TRUJILLO.
Después de transcurrir 62 años de ser Ajusticiado físicamente Rafael Leonidas Trujillo Molina, el dìa 30 de Mayo de 1961, el Dictador más sanguinario y cruel que conocen los pueblos de América Latina y la República Dominicana. Ejecutada esta acción por un grupo de Hombres patriotas que decidieron entrar por la puerta ancha de la historia y casarse con la gloria :Juan Tomás Diaz, Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Antonio Imbert Barrera, Luis Amiama Tío, Tunti Cáceres, Roberto Pastoriza , Pedro Livio Cedeño. Salvador Estrella Sadhalá, Huáscar Tejeda Pimental. Modesto Diaz. Aún persiste la superestructura que fundamentó esa Tiranía: Costumbres, Instituciones e ideas Dominantes en el imaginario popular.

Rafael Trujillo, se entronizó en el poder amparado en condiciones que fueron creadas por la intervención Militar Norteamericana del año 1916 al 1924. Los intelectuales y profesionales a su servicio crearon un sistema de vida y costumbres alrededor de la figura del Tirano que aún guardando la distancia se mantiene. Por donde quiera aparece un Trujillito. Es una cultura, un estilo Autocrático, Tiránico, Nespòtico y excluyente, forma vertical de dirigir el Estado y las instituciones para beneficio de un circulo impenetrable, en lo social, económico, político de una élite de poder.
El Mito de Trujillo y una especie de NeoTrujillismo se mantiene latente en ciertos segmentos de la sociedad Dominicana producto de la naturaleza Caudillista, autocrática, nespótica y paternalista que arrastra el Estado Dominicano desde su fundación en el 1844.
El Dictador Trujillo, llegó al poder en el año 1930, utilizando Bandas Criminales paramilitares como la 42 y la 44, integradas por militares activos y civiles delincuentes de la peor ralea, asesinos sin escrúpulos a quienes sacaban de las Cárceles, los usaban en la comisión de Crímenes atroces como el acontecido a Virgilio Martínez Reina y su esposa embarazada Altagracia Almanzar, el día 6 de Junio de 1930, en San José de las Matas, exfuncionario del Gobierno del General Horacio Vásquez, para sembrar el terror. Y luego estos delincuentes eran eliminados por las huestes del mismo Trujillo, para no dejar rastro.
Trujillo, también utilizaba esos crímenes espeluznables para sacar de circulación a funcionarios de su régimen que caían en desgracia, como en el caso de Virgilio Martinez Reina y su Esposa Altagracia Almanzar, quién estaba embarazada para acusar al General Piro Estrella y al Lic. Rafael Estrella Ureña, quienes lo auparon al poder y luego los apartó de su gobierno.
También los intelectuales y profesionales jugaron su papel importante sobre todo aquellos que se corrompieron por favores y conveniencias personales y familiares para servir incondicionalmente a la Tiranía. Los intelectuales Trujillistas fueron unos perversos, crearon una ideología basada en el culto a la personalidad de Trujillo y lo comparaban con Dios, para justificar los peores crímenes y atropellos contra la mayoría del pueblo y los opositores al Régimen, esos “intelectuales” llegaron tan lejos en su Adulonería y servilismo, que le cambiaron el nombre a la Ciudad de Santo Domingo, por el de Ciudad Trujillo, en el año 1936, pero lo mismo sucedió con todas las Provincias del País, las que tenían el Nombre o hasta un título del Dictador, o de algún Familiar, como si nuestro País fuere una Monarquía Hereditaria.

Luego de ajusticiado el tirano, la noche del 30 de Mayo de 1961, por un grupo de hombres paradigmas de Héroes, con una valentía de Gladiadores, todos con una vida prospera que lo dejaron todo incluyendo lo más preciado de un ser humano, su propia vida. Los males que nos legó esa maldita dictadura de Trujillo, se mantienen en toda su magnitud, vivimos en una sociedad muy desigual, donde cada vez es más amplia la brecha entre ricos y pobres, con una superestructura: las Instituciones políticas, Poderes del Estado, el poder social: Familias ricas, la Representación del País, las grandes riquezas financieras, la incidencia en las grandes decisiones del Gobierno y Estado, están en manos de la Oligarquía Cívica y Trujillista y de sus descendientes, así como de la cúpula de la Iglesia Católica, que luego de ajusticiado físicamente el Tirano heredaron el poder, abierta o solapadamente.

El Tirano Rafael Trujillo Molina, creo un sistema auxiliado por los intelectuales de la época, para que respondiera a su dominio despótico, se basó en lo fundamental en el uso y abuso del poder, para enriquecerse él y sus familiares y allegados, la centralización absoluta del ejercicio del poder político, el Uso de la Fuerza Armada y la Policía, como cuerpos privados que respondían a sus intereses políticos, personales, económicos, etc.
En lo económico disponía del erario público a su antojo aunque el País tenía leyes y todas las formalidades con instituciones, Poder Judicial, congreso, etc. todo se neutralizaba cuando de por medio se trataba del interés particular del Tirano. Utilizó el poder para enriquecerse junto a familiares y allegados, en Bancos Extranjeros tenía una fortuna para 1961, al momento de ser ajusticiado que rondaba los $1,000 MM de Dólares. El de Trujillo, fue un régimen de absoluta negación de las libertades públicas, de todo vestigio de oposición, la prensa era del Gobierno, quién nombraba los Directores y si algún medio privado no se sometía, era cerrado y sus ejecutivos eran perseguidos y apresados, cuando no tenían que marcharse al exilio sino corrían el riesgo de ser asesinados.
Placa que era obligatorio poner en todas las casas

Se celebraban elecciones de Diputados, Senadores y Síndicos, para llenar formalidades, ya que el incumbente “elegido” debía firmar una carta de renuncia antes de juramentarse, además Trujillo, nombraba Senadores, Diputados y Síndicos, cada vez que se le era conveniente por Decretos, era un régimen de carácter Monárquico.
En el ámbito religioso, la libertad de cultos estaba muy restringida, con excepción de la Iglesia Católica con la cuál Rafael Trujillo firmó un Concordato en el año 1954, para otorgar privilegios a ésta, que aún se mantienen. fue uno de los puntales en que se apoyó el Tirano para dominar a nuestro pueblo por 31 largos años.
En cuanto a los Sindicatos y la libertad sindical, no se permitió el movimiento Obrero, en el año 1946, surgió con fuerza un movimiento de trabajadores en los centrales Azucareros dirigido por el líder Mauricio Báez, en reclamo de reivindicaciones laborales y libertad sindical, siendo aplastado brutalmente con la represión policial y asesinado en Cuba en el año 1950, donde se encontraba exilado huyendo de la represión Trujillista.
La represión y asesinatos fue despiadada y cruel durante al régimen de Trujillo, el Genocidio contra los Haitianos de 1937, según cálculos, más de 40,000 Muertos, entre Mujeres, Niños, Niñas, Hombres y Ancianos. Se asesinaron Familias enteras como fue el caso de los Perozos y los Patiños de Santiago, incluyendo menores de edad, los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo, tras las expediciones de 1959, fueron ejecutados y torturados más de 200 integrantes de las mismas. En la Base Aèrea de San Isidro dirigida Por Ramfis Trujillo.17 Adolescentes llamados Los Panfleteros de Santiago fueron estrangulados y torturados en la Càrcel de La 40, en 1960.

Patria, Minerva y Maria Teresa Mirabal, asesinadas el 25 de Noviembre de 1960 por orden de Trujillo.
Los Sargentos técnicos de la Fuerza Aérea de 38, fueron eliminados 35 al descubrirse una conspiración para eliminar a Trujillo en 1959. Al develarse la creaciòn del Movimiento Clandestino 14 de Junio en el año 1960, más de 200 personas fueron eliminadas y en el mes de Noviembre fueron asesinadas las Hermanas Mirabal y su compañero Rufino de la Cruz. Al producirse el Ajusticiamiento del Tirano Trujillo el 30 de mayo de 1961, aparte de los 9 que participaron directamente en el atentado, Ramfis Trujillo, su hijo mayor, asesinó más de 200 personas, la mayoría sin ninguna relación con el acontecimiento, muchos por tener parentesco con los participantes y otros por vínculos de trabajo o de amistad.

Ese régimen despótico, aunque estaba hegemonizado por el Tirano Trujillo, siempre contó con los hombres y mujeres mejor formados intelectual y profesionalmente de las décadas de 1920 y 1930, es bueno que las nuevas generaciones conozcan su história de servilismo y compromiso con ese régimen nefasto, porque muchos de ellos tienen calles y avenidas que honran sus nombres, como es el caso de Rafael Vidal Martínez y Mario Fermín Cabral, Rafael Estrella Ureña, en Santiago y En Santo Domingo, Manuel de Jesús Troncoso de la Concha, Jacinto B, Peynado, Arturo Logroño, Manuel Antonio Peña Batlle, Arturo Despradel, Ramón Emilio Jiménez, Virgilio Diaz Ordoñez, Porfirio Herrera Báez, Francisco Prat Ramírez, Armando Oscar Pacheco, Rafael Paíno Pichardo, Tulio M. Cestero, Rafael F. Bonelly, Max Henríquez Ureña, Alberto Fond Bernal, Max Uribe.Anselmo Paulino,E:O: Garrido Puello.Emilio Rodriguez Demorizi..
Y otros que se lanzaron del Barco al hundirse la Tiranía. y el Dr. Joaquìn Balaguer, el heredero y continuador de la Dictadura, que se proclamò como tal en el panegírico pronunciado en el sepelio del dictador Trujillo el dìa 2 de Junio de 1961 en San Cristobal.
El Dr. Joaquín Balaguer fue el único político e intelectual que se mantuvo al lado y junto al Jefe por 31 años y luego gobernó 12 + 10 = 22, con un estilo Neotrujillista.
Muy propio estableciendo que èl no había cambiado sino las circunstancias.

Trujillo y su séquito en un acostumbrado desfile.
Para dejar atrás la superestructura Trujillista, que está representada por las instituciones e ideas que les sirvieron de soporte, se hace necesaria una permanente labor de concientización con las generaciones presentes y futuras, oponiéndole en la teoría y la práctica los valores de una verdadera democracia participativa, horizontal con el pueblo como máximo protagonista, por una patria libre, independiente y soberana, como soñaron Duarte, Sánchez, Mella y Luperón, y tantos buenos Dominicanos y Dominicanas, para que su sangre derramada no haya sido en vano.
Abajo: Carro en que fue acribillado a Balazos Trujillo la Noche del 30 de Mayo de 1961.Notese que tiene màs de 50 impactos de balas,6 de los cuales alcanzaron el cuerpo del Tirano, todos mortales según los Mèdicos Forenses.

Es un imperativo trabajar más en nuestro País la Memoria histórica,para desmontar la superestructura Trujillista(costumbres y prácticas sociales y políticas) que aún persiste como un pesado fardo sobre la conciencia del pueblo Dominicano y que motiva a muchos remanentes de ese maldito régimen a promover el retorno de ese estado de cosas superado en lo formal, pero que en el imaginario de segmentos de nuestra población está latente. Por ahí anda un Nieto de Trujillo reinvindicando el legado de su Abuelo, fundamentado en las fallas y falencias del sistema democrático pos Tiranía.
Se debe hacer un intento serio y persistente por crear una COMISIÓN DE LA VERDAD que se encargue de investigar y esclarecer los miles de crimenes y asesinatos que se produjeron durante la Tiranía Trujillista y los 12 años del Dr.Joaquín Balaguer,como ha sido la experiencias de los Paises de Centroamérica y SurAmérica, con los Crimenes de lesa humanidad cometidos por las Dictaduras Militares en las Décadas de los 60,70 y 80 del siglo pasado.Se Puede.
SEGUNDA PARTE.
DE INTERES HISTORICO. PRONTUARIO DELICTIVO Y CRIMINAL DE JOSE TRUJILLO VALDEZ Y LA FAMILIA TRUJILLO MOLINA.
Por considerarlo de alto interés histórico, pongo a la disposición de cualquier persona interesada en obtener datos poco conocidos por el gran público sobre los antecedentes Delictivos y Penales de la Familia Trujillo Molina, desde muchos años antes del Tirano Trujillo ascender al poder total como Presidente de la República en el año 1930.
Datos extraídos del Boletín del Archivo General de la Naciòn, AGN Año LXXIII, Vol. XXXVI, Num.129.
La familia de José Juan de Dios Trujillo Valdez, y Altagracia Julia Molina Chevalier. Padre y Madre del Dictador Rafael Leonidas Trujillo Molina, 1930-1961.
El presente trabajo está dirigido a las generaciones de dominicanos que vivieron la Era de Trujillo y que aun la añoran, para que conozcan con pruebas irrefutables la naturaleza criminal de la gente que gobernó tanto tiempo al país. A las nuevas generaciones, para que tengan un testimonio y unos argumentos que les permitan rechazar cualquier insinuación en torno a la necesidad de un gobierno de fuerza en este país para hacer cumplir las leyes rajatablas y crear un orden artificial, para que rechacen con toda su energía dichas pretensiones. El país necesita una democracia más participativa y la desaparición del clientelismo caudillista, para enrumbarse por los senderos de la paz y el progreso anhelados y no otra cosa. Finalmente, para que las nuevas generaciones puedan evaluar las ofertas electorales que se les presenten y escudriñen sobre la naturaleza y el perfil de cada candidato antes de emitir algo tan sagrado como su voto, y así, jamás sean cómplices de la corrupción y el crimen.
Relevancia de los documentos
Treinta y dos documentos inéditos localizados en diferentes legajos en el AGN, correspondientes a la Guardia Republicana y la Gobernación de Santo Domingo, constituyen la base de datos del presente trabajo. Ellos revelan algunos de los hechos delictivos en que se vieron envueltos en su temprana juventud diferentes miembros de la familia Trujillo, padre e hijos. Falsificaciones, crímenes, violaciones, prostitución, enlace con grupos sediciosos, participación en conspiraciones entre otras, marcan la vida de esta familia desde muchos años antes de llegar al poder.
Muchos biógrafos de la familia y de Rafael Leónidas tenían conocimiento sobre algunos de estos actos, pero no tenían pruebas documentales sobre los mismos. Todo comenzó con un encuentro casual de un oficio de la Gobernación de Santo Domingo, donde se informaba del apresamiento a Petan por propinar una cachetada a un menor. Luego apareció otro documento donde decía que en julio de 1912 Rafael L. Trujillo había escondido a unos conspiradores contra el Gobierno de turno, en ese momento presidido por el General José Bordas Valdez, en casa de Lucas Díaz. A partir de ahí surgió la curiosidad de la búsqueda, pues para realizar tal actividad tuvo que tener una conexión muy fuerte con los cabecillas, de quienes era una persona de confianza. Aquí se presentan y se comentan los documentos encontrados, juntos a otros complementarios de diferentes autores.
Cuando se habla de Trujillo-Molina, se trata de la misma familia que oprimió a la República Dominicana durante más de 30 años, con métodos propios del despotismo oriental, y otros más sofisticados y efectivos medio de torturas tradicionales y modernas. Comprendía, además de los Trujillo Molina, a los Pina Chevalier[1], Álvarez Pina[2] y a una serie de grupos familiares muy allegados. Todos funcionaron como un equipo, en lo que fue el dominio y explotación inmisericorde de este pueblo, cuyas riquezas saquearon y donde la dignidad humana carecía de valor alguno. Lo único que valía era la persona de Trujillo, en torno a la cual se estableció un culto, que lo coloco como la figura cimera a lo largo de nuestra historia, porque fue “quien completó y superó la obra de Duarte”, según la opinión de sus ideólogos, que como Ramón Emilio Jiménez[3], y otros más que sería prolijo enumerar, solo les faltó decláralo Dios.
José Trujillo Valdez, Pepito y sus hijos José Arismendi, Petan; Rafael Leónidas, Chapita, (los demás no son mencionados en los documentos que anexamos), conocieron la persecución y la prisión en su juventud, debido a su febril actividad callejera, que los haría delinquir una y otra vez. Logrado su objetivo de escalar el Poder, se vengaron con creces del inocente pueblo dominicano que cayó en su trampa.
Los biógrafos de Trujillo se dividen en dos grupos; uno son sus apologistas, dispuestos a la alabanza, al engrandecimiento exagerado de su figura y de su obra (Balaguer, Ramón Emilio Jiménez, Abelardo R. Nanita, Gilberto Sánchez Lustrino, Francisco Espaillat de la Mota, entre tantos); otros son sus críticos, quienes han estado a la búsqueda de la verdad sobre sus orígenes, con mayor o menor grado de objetividad, aunque alguno haya caído en exageraciones por su condición de víctima. En este último grupo se inscriben German Emilio Ornes Coiscou, Robert D. Crassweller, Albert C. Hicks, Bernardo Vega, entre otros.
Ellos hablan de acontecimientos en los cuales participaron los hermanos Trujillo, especialmente Rafael Leónidas, antes, en sus años juveniles y luego siendo miembro en la Guardia Nacional Dominicana, a la cual ingresó como oficial –segundo teniente- atendiendo a diversas recomendaciones. Otros tratan sobre el mismo personaje refiriéndose a los actos delictivos y los sometimientos a la justicia ocurridos entre 1916-1918. Ahora aportamos documentos sobre hechos desconocidos en los cuales participaron el padre y sus hijos a partir de 1912 hasta después de 1918, encontrados en el Archivo General de la Nación, AGN.
Todos esos biógrafos coinciden sobre los pocos datos que se tienen de aquellos primeros años y casi todos repiten o se citan mutuamente, aunque no aportan un documento contundente, como fueron las entrevistas a la señora Isabel Guzmán[4], violada por Rafael Trujillo en los Llanos, y la parte del juicio en Corte Marcial que se le siguió entonces, también por exigir dinero para soltar prevenidos, publicada por Fèliz Servio Ducoudray hijo, en la revista ¡Ahora! de septiembre a noviembre de 1973. Todos los datos apuntan a que Rafael Trujillo tuvo una vida de pandillero juvenil junto a sus hermanos, especialmente de Petan, por la comisión de delitos graves que nunca fueron castigados, pues incluso la falsificación de 1916 a la que alude Albert C. Hicks, muestra que, aunque le dictaron una sentencia, se la ingenio para no cumplirla. ¿Con que protector contaba Trujillo en las altas esferas que le permitía violar impunemente la decisión de un tribunal? siempre hemos sostenido que Trujillo no fue solo Trujillo, sino un equipo de hombres con planes siniestros. Gozò del aprecio y apoyo de las Tropas de Ocupaciòn de los EUA, por sus servicios en la persecución de los Patriotas denominados Gavilleros.
Cuando Hicks vino al país e investigò los hechos, aùn estaban vivos muchos testigos claves; German Ornes y Langa Mota colaboraron con el régimen, del cual se apartaron luego y fueron conocedores de hechos que no trascendieron al público, y que con el tiempo cayeron en el olvido o fueron tergiversados.
Aprestos juveniles y lazos familiares
Contrario a las afirmaciones de algunos de sus biógrafos, para 1912, según el documento que se publica màs abajo, Rafael Trujillo laboraba como telegrafista en San Cristóbal. Hay un dato inexacto de Crassweller sobre el tiempo que duró en ese trabajo, si fue en 1907 y permaneciò 3 años, no hubiera estado en 1912 en dicho cargo, pues ya se sabe que en julio de ese año está involucrado en el grupo Bonnetti luchando a favor de Bordas.
También es inexacto que no existiesen pruebas documentales de su vida a partir de ahí, ya que los documentos encontrados en los expedientes de la Guardia Republicana y la correspondencia de la Gobernación de la Provincia Santo Domingo de 1912 a 1915 prueban que no solo èl, sino gran parte de la familia Trujillo Molina estaba involucrada en conspiraciones y jugando extraños papeles entre el Gobierno, incluyendo a su padre, tanto en contacto con los conspiradores, como colaborando con las autoridades de San Cristóbal durante el gobierno de BordasValdez.
Crassweller dice que: el juez de primera instancia de San Pedro de Macorís, Miguel Febles, le impuso una multa y la pena de cárcel; pero Trujillo se las compuso para evitar el encarcelamiento. Asimismo se le considerò sospechoso de complicidad al faltar una suma de dinero de la oficina postal de Santo Domingo, donde trabajó por breve tiempo; pero nunca pudo probarse el cargo (P.48).
Para el mes de Julio de 1912 andaba envuelto en aquella conspiración a favor de Bordas Valdés, que hasta entonces había estado aliado a Horacio Vásquez. Pocos detalles se conocen del papel real de Rafael L. Trujillo en dicha conspiración. Por los interrogatorios practicados a los apresados en el grupo que dirigían en 1912 Arístides Bonnetti, sale a relucir que:
Rafael L. Trujillo se entrevistó más allá de Nizao con Arístides Bonnetti después del desbande y que Trujillo los llevó a casa de Lucas Díaz donde los dejo hospedados y que allí les quitaron las carabinas que supone deben encontrarse cerca de esa casa; que oyó decir a Manual María que Trujillo había dicho que los alambres del telégrafo estaban mal, por vivir en el teléfono.
El 8 de febrero de 1913 por orden del procurador fiscal de la Provincia de Santo Domingo fue detenido José Arismendi Trujillo. La causa no se especifica en el oficio al Ministerio de lo Interior y Policía. ¿Sería por robar gallinas o ganado, o por golpear a los menores o por el asesinato de la calle Espaillat? pero quizás fue por servir de guía a los alzados, como en otras oportunidades.
Rafael L. Trujillo en la Policia Nacional Domincana, PND.
Por otro lado, Hicks (1996) dice que en 1918 “el mismo solicitó su enganche, Trujillo fue sentenciado a 6 meses de cárcel por falsificación de documentos”.
(…) el 9 de diciembre de 1918 dirigió una carta al coronel C. E. Williams, comandante de la Guardia Nacional Dominicana, creada por los Marines Ocupantes del país del 1916 al 1924 ,concebida en los siguientes términos”.
El que suscribe por su digno órgano solicita un puesto de oficial en la honrosa institución de la Guardia Nacional Dominicana. GND.
Con perdón de la modesta, debo significarle que no poseo vicios de tomar bebidas alcohólicas ni de fumar y que no he sido sometido a tribunales ni siquiera para asuntos de simple policía.
En mi pueblo natal San Cristóbal a 30 kilómetros de esta ciudad, pertenezco a la primera sociedad y mi edad es de 27 años, de estado casado.
En San Cristóbal pueden dar testimonios de mis costumbres y maneras de conducirme, personas honorables y en esta capital los señores Rafael A. Perdomo, juez de instrucción de Primera instancia y el Lic. Armando Rodríguez, jurídico de la Secretaria de Estado de Justicia e Instrucción Pública.
Le saluda atentamente, Rafael L. Trujillo.
Como se puede apreciar, en ese documento casi todo cuanto dice es mentira. Pero nada de eso importó. Continúa diciendo Crassweller:
El 18 de diciembre presentaba otro escrito; se trata de una certificación con membrete de la Central del ingenio azucarero de Boca Chica, firmada por su administrador, Antonio Trigo. Decía así:
A todos los que la presente vieren, Certificamos:
Que durante el tiempo que el señor Rafael Leonidas Trujillo, desempeño el cargo de jefe de Guardas Campestres de este ingenio, cumplió estrictamente sus deberes, prestando atención y vigilancia al mejor cuidado de los intereses que le fueron encomendados, con disposición y hombría de bien.
Esta administración se complace, asimismo, en memorar la felicitación que recibiera del Departamento de la Guardia por tener un empleado de las condiciones del señor Trujillo.
La aceptación fue firmada el 27 de diciembre, como segundo teniente, juramentándose el 11 de enero de 1919.
Quien fue señalado como el militar norteamericano que ayudó al ingreso de Trujillo a la Policía Nacional Dominicana, el mayor James J. McLean, era íntimo amigo de Teódulo Pina Chevalier el tío materno de Trujillo, quièn murió asesinado y hay quienes insinúan que Trujillo tuvo algo que ver con eso por la cantidad de secretos que poseía sobre él. En enero de 1920 Rafael Leónidas Trujillo fue acusado de violar una campesina en los Llanos y exigir dinero para soltar gente apresada, por lo que es sometido a una Corte Marcial donde fue absuelto, porque los testigos «se acobardaron». El método de apresar y soltar por dinero sigue siendo una gran fuente de enriquecimiento, utilizado por los oficiales policiales y militares hasta nuestros días. Nota de Angel María De León. El Tirano Trujillo gozó de mucho apoyo y simpatía en las Tropas de ocupación Norteamericana 1916-1924, por el papel destacado que jugó en la persecución, apresamientos y muertes de los Patriotas llamados despectivamente “Gavilleros”, que defendieron con las armas en las manos la independencia y soberanía nacional.
A MODO DE CONCLUSIÓN
En definitiva, el país fue gobernado durante treinta y un años por esa pandilla de delincuentes, quienes desde el poder sencillamente refinaron sus métodos de robo, extorsión y saqueo de la riqueza nacional; un grupo de personas sin escrúpulos de ninguna índole que navegaron en sus aguas, pues las crápulas que siempre están disponibles en cada país, prestas a servirles a esa clase de gente, para servirse a su vez de las boronas que aquellas permiten que se les caigan, estuvieron a la orden del día.
Así, los sectores criollos que les apoyaron, unos satisfechos de la paz que disfrutaban, sin importar los métodos utilizados para lograrla; otros, buscando ventajas particulares, como en los mejores momentos del clientelismo. Trujillo lo era todo, el benefactor, el padre de la Patria Nueva, el primer maestro y el hombre más rico del país al que convirtió en su gran hacienda, siendo dueño o socio mayoritario de casi todas las empresas e industrias del país, que después de su caída fueron pésimamente administradas bajo las nomenclaturas de CORDE y CEA, pero además de otras empresas que quedaron a nombre de testaferros conocidos, y que nunca han sido tocados.
Visto en parte, el perfil delincuencial del jefe y su familia, hay que suponer que también sus cómplices desempeñaron un papel notable dentro de su gobierno y que pasaron a ser «gente honorable». Este clan se apoderó del poder político de este país, y actuó desde la cima aplicando el terror y sembrando la muerte en toda la geografía nacional. Es posible que nuevos documentos revelen hechos hasta ahora desconocidos. Aquí van 32 nuevos documentos que involucran a la familia Trujillo en todo cuanto se ha dicho, que no habían sido citados por ninguno de sus biógrafos:
ANEXOS:
Doc. 1
Informe de Guardia Republicana en 1908 destaca la presencia de José Trujillo Valdez en la Capital
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro Núm. 244 bis E-1, 1908.
Santo Domingo, noviembre 24 de 1908.
Ciudadano
Jefe Superior de la Guardia Republicana.
Su Oficina
Ciudadano
En el curso de las últimas 24 horas transcurridas ha habido el siguiente movimiento de pasajeros:
A saber:
De Puerto Plata: Entraron al Hotel Ambos Mundos
Ramón Saavedra, de Puerto Plata
José S. Castro, de Macorís
Hotel América: Entraron Jorge Núñez, de Macorís
Nuevo Mundo: Entraron José González, Puerto Rico
Hotel Ozama: Entraron
José Trujillo, de San Cristóbal
Juan de Jesús Frías, de Macorís.
Lo que comunico a Ud. para su conocimiento y fines. Salúdale atentamente, el teniente jefe de Puesto, Juan Puello.
Doc. 2
Trujillo escondió a los cabecillas de un grupo conspirador en casa de Lucas Díaz
AGN, Guardia Republicana, libro Núm. 307 E-1, 1912.
Jefatura Superior Guardia Republicana
Santo Domingo 2 de julio de 1912
COPIA.
En la capital de Santo Domingo, a los dos días del mes de julio del año de mil novecientos doce, yo, Marcelino Lozano hijo, jefe superior de la G. R. int. Procedí al interrogatorio de rigor en las personas de los nombrados Heriberto Santos y Ezequiel Evangelista, capturados y de los del grupo sedicioso que acompañaba al cabecilla Arístides Bonnetti.
Interrogado el nombrado Heriberto Santos, dijo ser natural de esta capital, residente en San Carlos, de veintitrés años de edad, soltero. Contestó: que el jefe del grupo era Arístides Bonnetti y que el nombrado Miguel Bobadilla fue quièn lo conquistó y lo hizo ir donde Bonnetti, el cual le dijo que deseaba que lo acompañara, pues José Bordas iba a salir acompañado de un grupo; que lo citó como para las doce de la noche del domingo veintitrés del pasado mes de junio; que en el grupo que se reunió viò a Ml. María Rodríguez, Miguel Bobadilla, Bienvenido Gautier, Luis Lamarche, Arturo Bonnetti, Bienvenido Pastor y un hermano, Miguel A. Álvarez, Evangelista y otros más que no recuerda; que la reunión se efectuó en el potrero de Pedrito Lluberes, y que esa misma noche de uno a otro potrero hasta llegar al otro lado de Haina, donde subieron a una loma reuniéndose Pedro Marte con un grupo de los cuales se le fueron unos cuantos; que desde Sabana Grande de Palenque donde atacaron habiendo tenido un herido, el hijo de Pedro.
Que ahí tuvieron solamente como una hora o más; que siguieron a Bani, acampando cerca del pueblo reuniéndosele un grupo en que hicieron su entrada al pueblo sin disque de allí salieron porque no le dieron ni un centavo en el Roblegal con fuerzas del Gobierno quienes los derrotaron; que Arístides los engañó diciéndoles que José Bordas se encontraba en San Cristóbal; que en Haina se les unió un tal Bone y Ramón Amonte; que del otro lado de Haina Pedro Marte y Arístides Bonnetti les quitaron a todos las carabinas, llevándoselas, y que después cada cual cogió por su lado. Que Manuel dijo a Bonnetti que lo llevara a Haití y que supone que las enterrabas; que él supone estar Laíto, porque preguntó a Arístides si Laíto estaba con èl Andújar por ciertas conversaciones que oyera.
Evangelista, natural de esta capital, vecino de «San Pedro», manifestó: que vio el domingo veintitrés y que le manifestó que lo necesitaba para irse si lo esperaba. (Igual que el anterior su declaración fue que el jefe era Arístides Bonnetti y acompaña Manuel María Rodríguez, Arturo Guerra hijo, Luis Lamarche, Heriberto Santos, Bienvenido Pastor y un hermano, Miguel Bobadilla, B. Gautier, Arturo Bonnetti, Pedro Germán, Miguel A. Álvarez, A. Cabral, Juan Pou y otros más; que en Sabana Grande de Palenque fue que le dieron una carabina —declara de la entrada a Palenque lo mismo que el anterior interrogado— que oyó preguntar por Laíto Guerrero y que al pasar por Palenque oyó decir «aquí debe confiarse en Pedro Andújar»; que comieron en Nizao donde una señora creo de apellido Guerrero; que Rafael L. Trujillo se entrevistó más allá de Nizao con Arístides, después del desbande y que Trujillo los llevó a casa de Lucas Díaz donde los dejó hospedados y que allí les quitaron las carabinas que supone deben encontrarse cerca de esa casa; que oyó decir a Manuel María que Trujillo había dicho que los alambres del telégrafo estaban mal, por vivir en el teléfono; que salieron juntos para esta, él, Pou, Santos, Guerra, los dos Pastor y Arístides; que Manuel María se les unió en Cambita, marchándose Arístides con él, según dijeron con rumbo hacia Haití; que se encontraban todos desarmados; que el motivo del desarme fue por haberle pedido el grupo dinero a Arístides y este se lo negó por no tener; amenazando Pedro Marte a Arístides con matarlo.
Santo Domingo, julio 3 de 1912
MARCELINO LOZANO
AGN, Presidencia de la República
Correspondencia, libro Núm. 77, 1913
Doc. 3
Petán preso por orden del Procurador Fiscal
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro-276, 1912-1914.
Gobernación de la Provincia de Santo Domingo
Núm.165
Santo Domingo, 8 de febrero de 1913
Ciudadano Secretario de Estado de lo Interior y Policía
Palacio
Ciudadano:
Según parte de la Jefatura de zona, han ocurrido durante las 24 horas las novedades siguientes:
Reducidos a prisión por orden del procurador fiscal los nombrados José A. Trujillo y los menores Juan Andrés y Francisco Reyes , fue detenido por la guardia que presta servicio en la Gobernación, conducido a este Cuartel General el nombrado Oscar Juan y fue conducido a esta el menor Juan Jameston ,Inglesito prevenido de haberle inferido una herida a la señorita Felipa Uribe; fue puesto a disposición del procurador fiscal y fueron detenidas y sometidas a la Alcaldía las nombradas María de Belén Guante y Manuela María Martínez por escándalo en la vía pública y Bienvenido Luna, sometido al procurador fiscal por haber violado la casa propiedad de la Sra. Rosa Julia Ruiz.
Todo lo que traslado a Ud. para su conocimiento muy atentamente,
R. CASTRO RUIZ
Gobernador de la Provincia
Doc. 4
Bordas agradece a Trujillo y compartes
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 73, 1913.
Santo Domingo,
15 de abril de 1913
José García, Pablo Deveaux, Panchito Martínez, Plinio B. Pina, Rafael Trujillo. Baní
Enterado. Sinceras gracias por términos telefonema y ofrecimiento servicios.
Atentamente,
Doc. 5
Presidente Bordas niega empleo solicitado por José Trujillo Valdez
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República,
Libro Núm. 84, 1913.
Santo Domingo,
Abril 16 de 1913
Señor José Trujillo Valdez,
San Cristóbal
Apreciado amigo:
Tengo en mi poder su apreciable carta de fecha 16 del presente mes a la que correspondo gustoso.
Siento manifestarle que me veo imposibilitado de dejarlo complacido en sus deseos porque es criterio del Gobierno no proceder a la remoción de ningún empleado a no ser por faltas graves en el cumplimiento de sus deberes. Si ocurre alguna vacante que pueda convenirle, diríjase al gobernador de la Provincia, para que este lo recomiende al secretario de Estado correspondiente, por ser ese el trámite necesario.
De Ud. atto. s. s. y amigo,
Doc. 6
TELEGRAMAS URGENTES:
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 77, 1913.
¡Urgente!
Jefe Comunal San Cristóbal.
Su cuñado Pepito Trujillo ha estado aquí a buscar dinero para los revolucionarios y salió para allá. Hágalo preso y mándemelo aquí.
Presidente BORDAS. Sept. 7 de 1913
ALEJANDRO MENCÍA, secretario
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 77, 1913.
¡Urgente!
Jefe Comunal García, San Cristóbal. Le dejo a Ud. completa libertad para decidir asunto Trujillo. Le prevengo eso para que no lo sorprenda.
Presidente BORDAS. Sept. 7 de 1913
ALEJANDRO MENCÍA, secretario
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 77, 1913.
¡Urgente!
Rafael Trujillo, San Cristóbal.
Está complacido
Presidente BORDAS. Sept. 7 de 1913
ALEJANDRO MENCÍA, secretario
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 77, 1913.
¡Urgente!
General W. García, San Cristóbal
Basta que Uds. garanticen la incierta noticia Trujillo para complacerlos
Presidente BORDAS. Sept. 7 de 1913
ALEJANDRO MENCÍA, secretario
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 77, 1913.
¡Urgente!
Gral. R. Trujillo, San Cristóbal
Puede quedarse y venga con gobernador
Presidente BORDAS. Sept. 9 de 1913
ALEJANDRO MENCÍA, secretario
Doc. 7
Gobernador San Cristóbal dice Jefe Comunal tiene fe
Ciega en Rafael Leónidas y José Arismendi Trujillo
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 162, 1913.
San Cristóbal,
septiembre 9 de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, Secretario de Estado
de Guerra y Marina, Capital.
Ciudadano Gral. y amigo:
En este momento (las 9 pm) acaba de llegar el general Laíto García hacer (sic) una reconcentración en esta plaza. Esta la ha efectuado el general García espontáneamente, pues él no recibió la orden que le transmití para efectuarla, sino inducido por noticias confidenciales de que el Gral. Castillo se encontraba fuerte (sic) de doscientos hombres y en posiciones ventajosas en el lugar denominado La Cuchilla.
Dejo encargo a Hermógenes de pagar estas dos sumas del sobrante de los 60 pesos que Saviñón me ha ofrecido remitir diariamente después de deducir las raciones diarias de la gente que queda en plaza. También recibí 30 carabinas, gobernador FIÂLLO.
Doc. 12
Virgilio Trujillo desembarcó por el este y ordenan seguirle los pasos
AGN, Correspondencia de la Presidencia de la República, libro Núm. 76, 1913.
Santo Domingo,
16 de setiembre de 1913
Señor Gral. Fidel Ferrer, Macorís Mi estimado general y amigo:
Tengo recibidas sus atentas de fecha 11, 18, 13, y 15 del corriente, las que he leído con suma atención, me he impuesto debidamente de su contenido.
Por esas cartas he visto la forma en que se le quitó su gente, y siento eso tanto más, cuanto que yo ignoraba que se había procedido de ese modo con usted. Verdad es que no hay que culpar a Zenón, pues la orden fue dada desde aquí, de mandar esa gente a esta plaza, para armarlos y proveerlos de lo necesario.
El secretario Lovatón debe llegar de un momento a otro de los Estados Unidos, con armas y municiones y entonces le enviaré dinero para que pueda preparar un nuevo contingente. Mientras tanto, puede Ud. prestarme eficacísima ayuda prestándole su ayuda al gobernador y al comandante militar.
Tomo notas de las noticias referentes al desembarco del señor Virgilio Trujillo y le agradezco que siga gestionando para conocer los pasos que da por el Seibo ese señor y tenerme al corriente.
Sin otro particular, quedo como siempre, su affmo. Servidor y amigo,
J. Bordas V.
Doc. 13
Rafael L. Trujillo desde San Cristóbal informa al Gral. Tadeo Álvarez que Gral. Castillo acepta acuerdo de Puerto Plata
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 163, 1913.
Telégrafos y Teléfonos del Estado
San Cristóbal,
9 de octubre de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, secretario de Guerra.
Capital
Ayer despacho (sic) jefe comunal avisó cerca del Gral. Castillo, comunicándole bases convenio. General Castillo contesta por oficio diciendo que él acepta en todas sus partes lo que resuelva el jefe supremo de la revolución Gral. Vásquez, pero que espera indefectiblemente las disposiciones que este le comunique. Por aquí bien todo.
Salúdale,
R. L. Trujillo
Doc. 14
Secretario de Guerra y Marina solicita presencia presos Rafael L. Trujillo y su hermano Pipí
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 163, 1913.
Telégrafos y Teléfonos del Estado Núm. 159
San Cristóbal,
21 de octubre de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, secretario de Guerra
Capital
En este momento he despachado para esa, presos, a Rafael Trujillo, Chapita y a Pipí Trujillo.
Salud
GILBERTO MONTÁS.
Doc. 15
Pichardo informa desde San Cristóbal la captura de Petán Trujillo
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 163, 1913.
Telégrafos y Teléfonos del Estado Núm. 179
San Cristóbal,
23 de octubre de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, secretario de Guerra. Capital
Capturado Petán
Salud, PICHARDO
Doc. 16
Pichardo solicita gente confiable salgan al encuentro
del preso Petán Trujillo enviado a Santo Domingo
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 163, 1913.
Haina, San Cristóbal,
23 de octubre de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, Secretario de Guerra
Capital
Petán Trujillo, práctico que fue de los revolucionarios, va esa. Conviene que salgan a su encuentro gente insospechable.
Doc. 17
Mientras Rafael Leónidas da informes a
Secretario de Guerra, este pide preso a Petán
AGN, Ministerio de Guerra y Marina, libro Núm. 163, 1913.
Telégrafos y Teléfonos del Estado Núm. [201]
San Cristóbal,
24 de octubre de 1913
Gral. Tadeo Álvarez, secretario de Guerra. Capital
Según sus órdenes, le envío a Petán Trujillo. Han aparecido siete heridos más.
Salud, PICHARDO.
Doc. 26
Envían a Petán Trujillo a cumplir condena a San Pedro de Macorís
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro Núm. 294, 1914.
Gobernación de la Provincia de Santo Domingo
Santo Domingo, 28 de noviembre de 1914
Núm. 2004
Ciudadano
Secretario de E. de lo Interior y Policía, Palacio. Ciudadano secretario de Estado:
Pláceme comunicar a Ud. que conforme a los partes diario recibidos en este despacho de las comunes de esta dependencia, no ha ocurrido ninguna novedad.
Según partes diario recibidos de la cárcel pública de esta ciudad ha habido el movimiento siguiente:
Ingresaron los nombrados Marcial Peña, Abelardo Batista, Felino Silfa, Fco. Julia, Fco. Genao, Emilio Morales Félix, Manuel Mesa, Heriberto Estévez, y los prófugos Ernesto Rodríguez y José Disla. [Fueron] libertados: Carlos Rojas, Santos de la Cruz, Pedro Toribio, Fco. Miliano, J. Antonio Alcántara, Tomás Miliano, Pedro Lama, Jovino de los Santos, Juan Acevedo, Domingo Bustamante, Emilio Morales y Abelardo Batista. Fue remitido para San Pedro de Macorís a cumplir condena José Arismendi Trujillo Petán, según orden del Proc. fiscal, y se fugó el nombrado Nicolás Batista.
Todo lo que traslado a Ud. para su conocimiento.
Muy atentamente le saluda,
José Del C. Ramírez
Gobernador de la Provincia de Santo Domingo.
Doc. 27
Ordenan vigilar a Virgilio Trujillo
porque es probable «ande en algo»
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro Núm. 338, 1915.
Gobernación de la Provincia Santo Domingo
Santo Domingo, mayo 17 de 1915
Ciudadano secretario de E. de lo Interior y Policía, Palacio.
Para su conocimiento y demás fines transcribo a Ud. el telegrama que acabo de recibir del jefe comunal de Monte Plata. Dice así: «Procedente del Cibao se encuentra en esta, de paso para esa, Virgilio Trujillo, secretario que fue del general Pascasio Toribio, vigílelo, es probable que ande en algo. (fdo.) Jefe comunal Contreras».
Ya ese individuo está en camino para esta ciudad.
Muy atentamente le saluda,
R. SÁNCHEZ GONZÁLEZ
Doc. 28
Detenida por orden del jefe de la guardia, Nieves Luisa Trujillo
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro Núm. 338, 1915.
Jefatura Superior de la Guardia Republicana
Santo Domingo, junio 14 de 1915
NO 158
Secretario de Estado de lo Interior y Policía Ciudadano:
Durante las últimas 48 horas de servicio prestado por las fuerzas bajo mi mando, han ocurrido las novedades siguientes:
Zona de Santo Domingo:
Cabecera: Se encuentra detenido el nombrado José Meléndez prevenido de robo a la Sra. María Marcelino, y por sospecha de otro robo se encuentra detenido el nombrado Manuel de Jesús. Por orden del comandante de este Cuerpo, se encuentra detenida la nombrada Nieves Luisa Trujillo. Fue capturada Enemensia Martínez quien le dio muerte en días atrás a Silveria Martínez en lugar denominado La Ysabela. Citadas para hoy a las 9 a.m. las nombradas Filomena Encarnación y Rosa Martínez. De Samaná fue conducido, en calidad de preso, el señor Jacques Estuveiler, a este lo custodió el alférez Pimentel. Comunican desde Villa Duarte que el guardia Gerardo Segura fue herido en la cabeza en el lugar denominado Los Flailes.
Zona de San Pedro de Macorís:
Cabecera: Sometido a la justicia, al nombrado Eliseo Nieves por golpes que le dio a Pascasio Puello; sometido a la acción de la justicia Benito Pérez y Pedro Hernández por quejas expuestas de Agustín Jiménez de haberle sustraído a este un dinero del bolsillo. En las demás zonas, no hay ninguna novedad.
Le saluda muy atentamente,
C. JIMENES
Jefe Superior de la Guardia Republicana
Doc. 29
Aníbal Trujillo preso
AGN, Ministerio de lo Interior y Policía, libro Núm. 348, 1916.
Jefatura Superior de la Guardia Republicana
Santo Domingo,
3 de abril de 1916
Ciudadano secretario de Estado de lo Interior y Policía Ciudadano:
Durante las últimas 48 horas de servicio prestado por las fuerzas bajo mi mando, han ocurrido las novedades siguientes: (Extracto)
Zona de Santo Domingo:
«Se encuentra preso en San Cristóbal Aníbal Trujillo por hacer disparos cerca de Cambelén».
Doc. 30
Perfil de los hermanos Trujillo
presentado por Crassweller:[5]
Virgilio era desagradable, indigno de confianza, arrogante y en esencia un verdadero bruto. No resultaba extraño que siendo el mayor y por añadidura codicioso y ambicioso, se sintiera celoso por el principio de la primogenitura y se considerase con derecho a las prerrogativas que Rafael Trujillo había ganado con su propio esfuerzo. Virgilio era algo menos lujurioso que los demás, pero aun así incurrió en grandes excesos.
Petán era también un bruto integral propenso a la violencia y a la rapiña. Su afición al dinero estuvo presidida por una cierta viciada imaginación. El instinto comercial era en él quizá más nato que lo que fue en Trujillo, y estaba por igual desprovisto de conciencia. La sexualidad de los Trujillo alcanzó en él alturas extravagantes.
Aníbal no era personalmente desagradable, pero sí turbulento y errático, un rebelde integral, siempre en incesante movimiento. Lo mismo que los otros, no prestaba atención a las consecuencias morales de sus actos y con mayor despreocupación aún que los demás, nunca se detuvo a considerar otras implicaciones. En el ardid, el robo, la efusión de sangre y la prostitución halló los ingredientes de toda su vida.
Como los tres hermanos antedichos así eran los demás, quizá en proporciones algo menores. Pedro era una nulidad, pero hizo carrera en el Ejército por mero favoritismo hasta el grado de mayor. Era granjero de corazón; pero granjero depravado, porque violaba por igual propiedades y mujeres y juntamente con otros miembros de la familia tenía una parte substancial en la explotación de la prostitución en la capital.
Pipí era parecido a Pedro, solo que peor. Sus medios de vida procedían del latrocinio y de la violencia a un nivel inferior y corrupto. De todos los hermanos era él quien tenía la mayor participación en la prostitución organizada, la cual enviaba mujeres hasta Curazao, los «cueros», según la terminología usual entre los iniciados. No consideraba que el hecho de ser hermano del presidente de la nación fuese incompatible con robar automóviles o en envestir con el propio, deliberadamente, el automóvil de otro, para exigir luego, extorsivamente, de la otra parte un modelo nuevo. No se le permitía desempeñar funciones oficiales ni aparecía en público por lo que vivía oscuramente en una zona suburbana con otros rufianes y practicantes del latrocinio.
El último de esta notable serie era Héctor. Siendo el más moreno de la familia, el nombre de Negro por el que se le conocía, lo adquirió temprano, y continuó ostentándolo habiendo aun asumido la presidencia en 1952. Taciturno y más bien tranquilo, carecía de las pintorescas y perversas cualidades que compensaban la maldad de los otros.
Se le atribuían varios crímenes. Pero probablemente menor número que los demás. Cualquier restricción de su parte, sin embargo, era debida menos a la conciencia que a su inercia. El modo inerte de tender la mano, su hábito desde la temprana juventud de implícitamente seguir en todo a Trujillo, y su falta de iniciativa, todo evidenciaba una personalidad débil. Le gustaba el campo y compartía la devoción de Trujillo por la ganadería. Si hubiese nacido en el seno de otra familia, sin duda hubiera tenido que pasar su vida tratando de subsistir con el producto de algunas pocas y remotas tierras. La energía y la voluntad solo se manifestaban en él solamente cuando se trataba de mujeres y de dinero, cosas ambas fácilmente obtenibles.
Las cuatro hermanas se salían también de lo corriente. Marina y japonesa eran hogareñas, aunque se enriquecieron con negocios que realizaron por intermedio de sus maridos, quienes ocupaban altas posiciones en el Gobierno. Marina disfrutó de la protección de Trujillo hasta el punto de poder vender ocasionalmente al Gobierno, a precios desorbitados, varias casas que ella construía y habitaba por breve tiempo.
Julieta era la hermana rara, la que nunca dejó su casa, la que nunca se mezcló en la vida pública, casi por completo ajena a la familia. Su marido, Ramón Saviñón Lluberes, rico por herencia, acrecentó inmensamente su patrimonio al conseguir la concesión de la Lotería del Gobierno, negocio sumamente lucrativo, en especial desde que los agentes conservaban los billetes no vendidos y los incluían en los sorteos. A principios de la década de 1950, cómputos de fuente fidedigna calculaban los beneficios anuales netos de la lotería en aproximadamente 2.000.000 MM de dólares, más una suma igual proveniente de las quinielas; especie de lotería para el pobre, a la que por aquel entonces se extendió la concesión de la lotería ordinaria.
La cuarta hermana, Nieves Luisa, era diabética. Parecida a sus hermanos en el carácter, revoltosa, deshonesta y corrupta, era la más inmoral de las aventureras. Durante muchos años vivió en Cuba, alcanzando notoriedad y ganando una fortuna con la explotación de prostitución, negocio al cual aporto capacidad de acción y de ejecución; sus uniones ilícitas sumaron por lo menos dieciséis. Alternaba a referida actividad con la especulación en bienes raíces, mediante la venta de casas a elevados precios, una vez desalojados sus anteriores dueños con ayuda de influencias políticas (ob. cit., pp.153-154)
HASTA AQUÍ LA RESEÑA HISTORICA DE LA FAMILIA QUE ESTUVO POR 31 LARGOS AÑOS TIRANIZANDO AL PUEBLO DOMINICANO.
TERCERA PARTE.
El exterminio de la familia Perozo
UN TESTIMONIO PARA LA HISTORIA DE LOS CRIMENES DE LA DICTADURA DE RAFAEL LEONIDAS TRUJILLO MOLINA.

El exterminio de la familia Perozo. 13 de junio de 1945, asesinan al màs joven de todos ellos, Josè Luis Perozo.
La familia Perozo no escapó a la saña de Trujillo. Los hermanos Faustino y Andrés Perozo intentaron matar al dictador el 24 de mayo de 1932, en San José de las Matas.
Su hermano César Perozo también estaba implicado en la trama. El plan fracasó porque Trujillo llegó retrasado y todo parece indicar que hubo alguna delación, pues en la llamada Era de Trujillo eso era común. Los Perozo y la familia Martínez Reyna, también opositora a Trujillo, estaban estrechamente vinculadas, a tal punto que muchos conocidos no se atreverían siquiera a saludarlos, por temor a perder la vida por decisión de aquella tiranía inconcebible.
El mismo día 24 se produjeron dos enfrentamientos entre los conspiradores y un grupo de guardias.
Uno de ellos tuvo lugar en el sitio llamado Bajamillo, donde lo soldados los rodearon. El otro encuentro se produjo en Pedregal, municipio de San José de Ocoa donde murieron los hermanos Perozo, aunque otras versiones dan cuenta de que fue en el paraje Corralito, sección de Carrizal, a 25 kilómetros al sur de San José de las Matas.
Sobrevivieron a la acción armada siete compañeros, entre ellos Virgilio Mainardi Reyna y Lorenzo Álvarez Perelló (a) Puchulo, porque lograron separarse del grupo y escaparon hacia las estribaciones de la Cordillera Central.
Cientos de guardias los perseguían. Perdieron los mulos y tuvieron que separarse. Mainardi Reyna comentaría años más tarde que solamente supo que Álvarez Perelló logró llegar a la frontera, para entrar subrepticiamente hacia Haití, con lo cual salvó la vida.
Campesinos de la zona de los combates fueron apresados y fusilados por no haber reportado a las autoridades militares la presencia de los alzados, estos los convertía en “sospechosos de cooperar con el enemigo”, según se decía entonces.
Errante, cansado y casi muerto por el hambre, Mainardi Reyna logró sin embargo que algunos campesinos le proporcionaran comida. Según datos del historiador Bernardo Vega, en la confluencia de los ríos Bao y Yaque del Norte, municipio de Jánico, encontró la protección de Mongo Adames, un tío de Monseñor Roque Adames, quien fuera Obispo de Santiago. Don Mongo le asignó un peón para que lo sacara del monte que desconocía, pero el hombre se le desapareció, parece que por miedo.
En la sierra, en horas de la noche, Mainardi Reyna encontró un bohío, donde el dueño-ajeno a lo que había acontecido-conocía a la familia Mainardi, la cual tenía una finca en el sitio llamado La Otra Banda. Mainardi Reyna le pidió que le llevara hasta la finca, pero ocurrió que el general José Estrella-matón de Trujillo en el
Cibao-se enteró de la presencia de Mainardi Reyna en la finca y envió un nutrido grupo de guardias para capturarlo.
Un peón avisó a Mainardi Reyna del peligro que corría si se quedaba allí, razón por la cual esperó la noche para tratar de llegar a la ciudad de Santiago, como en efecto ocurrió al día siguiente.
Sin embargo, fue poco lo que duró en la casa paterna, pues por razones de seguridad tuvo que trasladarse a la residencia de Augusto Lora, quien con el tiempo sería vicepresidente de la República (1966-1970). Pero también de allí se marchó, trasladándose a una casa donde nadie podía sospechar que estaría un enemigo de Trujillo. Esa vivienda estaba cercana a la fortaleza San Luís. En ella vivía una anciana que se dedicaba a colar café para su venta. Era una amiga de la familia.
Mainardi Reyna vivió allí dos meses, mirando por las rendijas de los setos las patrullas que entraban y salían del recinto militar.
Rafael Mainardi, padre de Virgilio, logró entrevistarse con su amigo Trujillo en San José de las Matas. Trujillo, simulando que lo ignoraba todo, le preguntó qué buscaba en el lugar, a lo que su interlocutor le dijo que tenía un hijo “medio loco”. Trujillo, volvió a preguntarle quién era ese hijo.
Entonces don Fello le explicó todo el asunto, pidiéndole que concediera permiso para que su hijo pudiera salir del país. Cosa muy rara, Trujillo inmediatamente tomó lápiz y papel, con membrete de la Presidencia de la República y, tras poner la fecha San José de las Matas, 29 de julio de 1932, le concedió “amplias garantías al joven Virgilio Mainardi para que pueda hacer su presentación, y pueda, si lo desea, embarcarse para Puerto Rico”.
Igualmente recomendó a las autoridades civiles y militares prestarle toda clase de protección y ayuda”. Los padres de Virgilio lo buscaron y de inmediato lo embarcaron en el vapor Borinquen.
Virgilio Mainardi Reyna permaneció en el exilio hasta que Trujillo fue muerto a tiros la noche del 30 de mayo de 1961. Cuando retornó al país, ya decapitada la tiranía, fue designado Gobernador de Santiago. El autor tuvo el grato placer de entrevistarle varias veces en su residencia campestre de Santiago.
En una entrevista publicada por el desaparecido periódico El Día, Mainardi Reyna dijo: “Éramos una juventud rebelde y adolorida por los excesos cometidos abiertamente por la dictadura: por eso resolvimos jugarnos el todo por el todo para irnos a juntar a los invasores que, según decían los Perozo, estaba organizando (Rafael) Estrella Ureña en Haití o, en último caso, acelerar su llegada”.
Andrés Perozo, compañero de afanes de Mainardi Reyna, era abogado y llegó a ser juez de la Corte de Apelación de Santo Domingo en el gobierno de Horacio Vásquez.
Trujillo no podía soportar que un enemigo suyo estuviera en un cargo público, razón por la cual le pidió la renuncia. El licenciado Perozo, hombre firme y de ideas liberales, se negó. Trujillo ordenó encerrarlo en la Torre del Homenaje, donde se le hizo firmar la renuncia a la fuerza. Tiempo después fue puesto en libertad. El desprecio del licenciado Perozo y sus hijos hacia el dictador explica por qué querían darle muerte.
El investigador histórico José Abigail Cruz, en un relato sobre algunos de los crímenes de Trujillo dice que “la familia Perozo tuvo que pagar un precio de sangre muy alto por su oposición radical al régimen de Trujillo desde sus inicios; fue una lucha desigual, una lucha de exterminio que no conoció fronteras.
Esta valerosa y digna familia vio perder en cadena trágica a todos sus miembros varones, que uno a uno cayó abatido por los sicarios de la dictadura.
Murieron en todos los frentes, como valientes que eran, con las armas en las manos y sufriendo horrores por la persecución y desaparición. Era una familia sinónimo de heroísmo y estoicidad. Hombres y mujeres que enfrentaron al cruel tirano sin detenerse a pensar en el riesgo para cada miembro”.
José Luis Perozo, adolescente, tierno e indefenso encontró la muerte a manos de un criminal despiadado en el parque de San Francisco de Macorís, donde residía con su madre y hermana, después de salir despavoridos de Santiago de los Caballeros a causa de la persecución desatada en su contra por los esbirros de la dictadura.
La noche del 13 de junio de 1945 (un día como hoy), al regresar de estudiar con sus compañeros que preparaban el final de curso para los exámenes, un individuo se le acercó y le hirió con un cuchillo en el vientre. José Luís fue llevado al cuartel de la policía, donde se le desangraba, hasta que un médico llamado Federico Lavandier arriesgó su vida al tratar de auxiliarle, hasta que se permitió llevarle al hospital, distante a unos dos kilómetros, pero era demasiado tarde.
El jovencito tenía entonces trece años “Hoy día aquel gesto ético y valiente del profesional nadie lo recuerda”, comenta el ingeniero Leandro Guzmán, quien a partir de ahí sufrió un cambio en su vida, pues se dedicó a conspirar contra Trujillo hasta ser uno de los fundadores del Movimiento Clandestino 14 de Junio. Hoy día tiene 78 años y recuerda los hechos perfectamente.
Tras el crimen, el fiscal del municipio “invitó” a los compañeros de José Luis a que fueran a la cárcel, donde supuestamente se encontraba el asesino. Se les presentó un escenario terrible: colgando de una fina soga de mosquitero oscilaba un sujeto con un saco amarillo y pantalón del mismo color. Era un simple ladronzuelo que fue usado como chivo expiatorio.
En esos días, en la escuela donde estudiaba José Luís había aparecido un letrero en la pizarra que decía “Trujillo comemierda”. El profesor, Ángel Severo Cabral, reunió a los muchachos para advertirle que, si eso se sabía, la dictadura podría cerrar la escuela y meter presos a quienes considerara sospechosos.
Pero se supo, y los sicarios del régimen pensaron inmediatamente que el responsable era José Luís Perozo Fermín. Por eso, el 13 de junio de 1945, lo mataron, porque todos los Perozo y miembros de la familia Mainardi Reyna figuraban “en una lista negra” que era necesario eliminar.
La hermana de José Luís, Alfonsina, narra así aquellos dolorosos momentos para la familia mártir: “Han herido a José Luis”, fue el primer aviso de la tragedia anunciada por un amigo. “Cuando llegamos allá y vimos aquel niño tirado en el piso del cuartel, todo lleno de sangre, aquellos policías, como fieras acordonaron el recinto. Ni mi madre, ni yo, ni nadie podía dar un paso hacia adentro”.
El pueblo aglomerado asistía impotente a una desgarradora escena, de una madre clamando auxilio para un jovencito cruelmente apuñalado, dejado desangrar ante las miradas de todos. De modo que la víctima no era el niño asesinado, sino la madre misma y la propia multitud espectadora. La maquinaria trujillista que segaba vidas no respetaba a nadie. Caían dominicanos como también extranjeros si sus “faltas” eran contra el Jefe.”
Fuentes consultadas:
TESTIMONIOS Y BIBLIOGRAFIA.
“Vivencias” de Carolina Mainardi viuda Cuello. Editora Manatí, Santo Domingo 2000. Bernardo Vega. Trujillo y Haití. Editora Taller, Santo Domingo, 1995. De espigas y de fuegos. Leandro Guzmán Rodríguez, Editora de Colores, S.A., Santo Domingo, 1998. J. Armando Lora. La confabulación de los Perozo. El Día, Santiago, 29 de junio de 1981. Abigail Cruz Infante. Cosas que ocurrieron en la Era de Trujillo: algunos crímenes. Listín Diario, 27 junio de 1981.
[1] Guido Despadrel, “Juan Pablo Pina”, Renovación, Año XXXVI, Núm. 182 del 25 de marzo de 1971. Pina Chevalier (Plinio y Teódulo) era el apellido de los hijos de Juan de Dios Juan Pablo Pina y Luisa Ercina Chevalier, viuda de Pedro Molina, la madre de Altagracia Julia Molina.
[2] Álvarez Pina, era el apellido de quienes se suponían hermanos de pepito Trujillo, de su culto padre Braulio Álvarez, según José Agustín Concepción, revista ¡Ahora!, Núm. 512-520
[3] Ramón Emilio Jiménez, “Comentarios a un discurso deplorable” en el Caribe edición de 28 de enero de 1957, año IX Núm. 3203, p.1
[4] Isabel Guzmán, campesina violada por Trujillo, en los Llanos en 1919.
[5] Robert D. Crossweller, Trujillo: la trágica aventura del poder personal, Barcelona, Briguera, 1968.